TONALPOHUALLI
Al hombre antiguo le atemorizaba lo
desconocido, el miedo a la muerte le perseguía, las fuerzas de la naturaleza le
dejaban perplejo y desde lo más hondo de sus deseos reprimidos emergió la
amenaza de su ansiedad. No fue el técnico sino el sacerdote quien estructuro la
seguridad del hombre antiguo mostrándole los caminos de su existencia en una
malla intrincada de símbolos y relaciones también simbólicas que fueron
fundamento de la magia, la religión y los patrones de la vida. El calendario
sagrado de 260 días servía de horóscopo en la predicción de la personalidad,
los negocios y otros aspectos de la vida del recién nacido, dándole al hombre
antiguo seguridad y confianza en la vida,
sin embargo, no eran las estrellas las que ejercían una influencia
benéfica o dañina sobre él, sino las características del signo correspondiente
al día del nacimiento relacionado con ciertos atributos que el signo
representaba. Este calendario azteca
ritual se registraba en el tonalamatl (libro de los días), un
códice en piel de venado o papel de corteza a partir del cual un sacerdote (tonalpouque)
extraía horóscopos y predecía los días fastos y nefastos del ciclo. La
estructura (similar a la desarrollada mucho antes por los mayas,
y probablemente heredada de estos a través de los toltecas) comprendía un año de 260 días, a cada
uno de los cuales se asignaba una fecha por la combinación de uno de los 20
signos de los días y un número de 1
a 13, representado por puntos, de modo tal que era
imposible confundir dos días del ciclo anual. Por lo tanto, el almanaque estaba
compuesto de veinte trecenas, es decir, 20
semanas de 13 días, con la primera semana comenzando en 1-Caimán y terminando
en 13-Caña, la segunda entre 1-Ocelote y 13-Calavera, y así sucesivamente. Cada
uno de estos días se dividía en 13 horas diurnas y 9 nocturnas. Se creía que un
dios o una diosa presidían cada signo de los días, y cada uno estaba también
asociado a un punto cardinal (en
sentido de giro anti horario, comenzando por el Este, de donde sale el sol).
Los antiguos mexicanos ponían el nombre a las personas según el día en que habían nacido en este calendario sagrado, el códice florentino nos dice: después de haber nacido la criatura luego procuraban de saber el signo en que había nacido para saber la ventura que había de tener. A este propósito iban luego a buscar y a hablar al adivino que se llama tonalpouhque. Primeramente este adivino preguntaba por la hora en que había nacido la criatura. Y luego el adivino revolvía los libros; buscaba el signo en que había nacido, según la relación del que iba a informarle, y si el signo es mal afortunado, por ventura alguna de las trece casas que están contiguas a este signo es de buena fortuna o señala buena fortuna. Hablaba a los padres de la criatura, y a los viejos y viejas, y díselos: “el buen signo nació vuestro hijo, será señor o senador, será rico y valiente, será belicoso, será en la guerra valiente y esforzado, tendrá dignidad entre los que rigen las cosas de la milicia, será matador y vencedor” o por ventura les dirá: “no nació en buen signo el niño. Nació en signo desastrado, pero hay alguna razonable casa que es de la cuenta de este signo, la cual templa y abona la maldad de su principal” y luego señala el día en que se ha de bautizar, dice: “desde aquí a cuatro días se bautizara”. El día del bautizo del niño se hacía un ritual en el cual la partera le daba la bienvenida al niño a este mundo y lo encomendaba a los dioses, después de las ceremonias se le ponía el nombre al niño, de alguno de sus antepasados para que levante la fortuna y suerte de aquel cuyo nombre le dan. Este nombre le pone la partera o sacerdotisa que lo bautizo, se pone por ejemplo el nombre de Yaotl: comienza luego a dar voces y habla como varón al niño y le dice de esta manera: “yaotl, que quiere decir enemigo, recibe toma tu rodela toma el dardo que es poderoso para la batalla de todo el día. Y luego le ponían la mantillita atada al hombro y el ciñen el taparrabo. En este tiempo que estas cosas se hacen se juntan los jóvenes del barrio, y al terminar las ceremonias entran en la casa del bautizado y toman la comida que allí les tenían aparejada, y a esta llaman “el ombligo del niño” y salían huyendo con ella, y luego comenzaban a gritar el nombre del niño.
Los antiguos mexicanos ponían el nombre a las personas según el día en que habían nacido en este calendario sagrado, el códice florentino nos dice: después de haber nacido la criatura luego procuraban de saber el signo en que había nacido para saber la ventura que había de tener. A este propósito iban luego a buscar y a hablar al adivino que se llama tonalpouhque. Primeramente este adivino preguntaba por la hora en que había nacido la criatura. Y luego el adivino revolvía los libros; buscaba el signo en que había nacido, según la relación del que iba a informarle, y si el signo es mal afortunado, por ventura alguna de las trece casas que están contiguas a este signo es de buena fortuna o señala buena fortuna. Hablaba a los padres de la criatura, y a los viejos y viejas, y díselos: “el buen signo nació vuestro hijo, será señor o senador, será rico y valiente, será belicoso, será en la guerra valiente y esforzado, tendrá dignidad entre los que rigen las cosas de la milicia, será matador y vencedor” o por ventura les dirá: “no nació en buen signo el niño. Nació en signo desastrado, pero hay alguna razonable casa que es de la cuenta de este signo, la cual templa y abona la maldad de su principal” y luego señala el día en que se ha de bautizar, dice: “desde aquí a cuatro días se bautizara”. El día del bautizo del niño se hacía un ritual en el cual la partera le daba la bienvenida al niño a este mundo y lo encomendaba a los dioses, después de las ceremonias se le ponía el nombre al niño, de alguno de sus antepasados para que levante la fortuna y suerte de aquel cuyo nombre le dan. Este nombre le pone la partera o sacerdotisa que lo bautizo, se pone por ejemplo el nombre de Yaotl: comienza luego a dar voces y habla como varón al niño y le dice de esta manera: “yaotl, que quiere decir enemigo, recibe toma tu rodela toma el dardo que es poderoso para la batalla de todo el día. Y luego le ponían la mantillita atada al hombro y el ciñen el taparrabo. En este tiempo que estas cosas se hacen se juntan los jóvenes del barrio, y al terminar las ceremonias entran en la casa del bautizado y toman la comida que allí les tenían aparejada, y a esta llaman “el ombligo del niño” y salían huyendo con ella, y luego comenzaban a gritar el nombre del niño.
ELEMENTOS DEL ARTE ADIVINATORIO
El ser humano siempre ha querido conocer los
secretos de su destino. Con auto sacrificios, ayunos y meditaciones ha
pretendido invocar a unos seres más poderosos que él, los dioses, para que le
revelen su futuro. Ha observado las fuerzas y ritmos de la naturaleza,
intentando descubrir los secretos que podrían arrojar luz sobre los frutos de
su trabajo. Ha plasmado el saber adquirido en libros esotéricos y
adivinatorios. Varias culturas conservan esos libros. En el México prehispánico
esta función la cumplieron los tonalamatl,
libros manuscritos que llevaban la cuenta de los días; en ellos se basaban los
sacerdotes para averiguar cuál sería el futuro de las empresas de todo el
pueblo y cual el destino de cada recién nacido. Esos saberes sagrados y
secretos para vaticinar se han perdido; sin embargo en las bellas páginas de
los códices antiguos se despliega el misterioso mundo de los dioses que
manifestaron sus fuerzas en tiempos precisos, influyendo así en las acciones
humanas. En el México antiguo el arte de la adivinación estaba a cargo de un
grupo llamados tonalpouque quienes
recibían grandes regalos por predecir el futuro de los recién nacidos entre
otras cosas, para llevar a cabo tal tarea tomaban en cuenta los siguientes
elementos:
- Los signos de los años
- Los signos de los días
- Los números de los años
- Los números de los días
- Los rumbos
- Los dioses de los días
- Los dioses de las trecenas
- Las horas diurnas o nocturnas
- Las aves agoreras
Signos de los años
TOCHTLI
El conejo se asociaba con la luna y con el pulque, bebida alcohólica
hecha de maguey. Los cuatrocientos conejos eran los dioses del pulque, por eso
los nacidos bajo este signo corrían el peligro de aficionarse demasiado a esa
bebida.
ACATL
El glifo muestra astas de flechas, pues estas armas se hacían de ciertos
tipos de carrizo. La caña esta hueca por dentro, por eso se relaciona con lo
vació, y tal vez por esta razón no se considerara buen signo, ya que las
riquezas que pertenecían a los nacidos en este día estarían expuestas a riesgos
y perdidas.
TECPATL
Ese día se representaba como un cuchillo de pedernal pintado en
forma variada. A veces el cuchillo tiene
una boca abierta llena de dientes; otras se le presenta personificado como un
ser extraño con cabeza de cuchillo de sacrificio. Era el peor signo de todos,
ya que implicaba infertilidad, fracaso y hasta muerte
CALLI
La imagen con la cual se dibujaba este día representa una casa o un
templo con techo de paja. Como la casa se asocia con el refugio y el reposo el
signo pasaba por bueno.
Los números
Indiferentes: 1 y 2
Nefastos: 4, 5, 6, 8, 9
Fastos: 3, 7, 10, 11, 12, 13
Los rumbos
Sur
Tochtli
Incierto e indiferente su color es el azul su símbolo el conejo al que acompañan la hierba, el zopilote, la flor y la lagartija.
Oriente
Acatl
Región de la luz su color el amarillo su
símbolo la caña representa la fertilidad y la vida: lo acompañan movimiento,
cocodrilo, serpiente, y agua.
Norte
Tecpatl
Región de los muertos lugar frío y desolado su
color es el negro y su símbolo el pedernal lo acompañan viento, muerte, perro y
jaguar.
Poniente
Calli
Rumbo decadente de la casa del sol y las
mujeres su color es el rojo y lo acompañan el venado, el mono, el águila y la
lluvia.
Dioses de los días
Cipactli Tonacatecuhtli
El
patrono de este día es el dios Tonacatecuhtli
señor de nuestra carne, este dios no tuvo principio siempre ha existido y del
deriva todo: el empezó el gran acto de la creación dando vida a cuatro
deidades: Tezcatlipoca azul, Tezcatlipoca rojo, Tezcatlipoca negro y Quetzalcoatl.
Después de haberlos creado y de delegarles la formación del mundo, se refugió
en el lugar más lejano de este, en el último, el decimotercero piso celeste
llamado omeyocan, lugar de la
dualidad, él enviaba los niños al mundo y de él dependía la existencia; su otro
nombre Ometecuhtli señor de la
dualidad está representado por su postura, ya que el dios aparece de perfil con
las piernas abiertas al frente, que es la postura en que se representan a las
diosas que dan a luz; los antiguos mexicanos se referían a él como: “nuestra
madre, nuestro padre”
Ehecatl Quetzalcoatl
El patrono de este día es Quetzalcóatl la
serpiente emplumada, quien junto con Tezcatlipoca
es uno de los dioses creadores más importantes, separo el cielo de la tierra
desgarrando al enorme monstruo cipactli,
formando el cielo y la tierra de él. Quetzalcóatl dio vida a los hombres
robándose del inframundo los huesos que Mictlantecuhtli el dios de la muerte guardaba, una vez
creados los humanos él se encargó de darles el maíz fuente de los alimentos en
el México antiguo, también a él se atribuye la invención del tonalamatl
Calli Tepeyolotl
El señor del día casa es Tepeyolotl,
corazón de la montaña, una deidad misteriosa que aparece como jaguar, en
realidad nahual, doble de Tezcatlipoca,
esta era una de las formas que tomaba el hechicero divino para manifestarse.
Cuetzpalin Huehuecoyotl
El coyote viejo, deidad de la danza, la música, el canto, el baile y el
instinto sexual, pero también con la discordia.
Coatl Chalchiuhtlicue
Su nombre se compone de chalchiuhuitl piedra preciosa verde y cueitl, falda es decir la de falda de
jade, era esposa de Tláloc dios de la lluvia, era una diosa muy venerada puesto
que es la señora de las aguas terrestres, ríos lagos etc. Aunque de ella
dependía ese elemento indispensable para la vida, era una diosa temible.
Miquiztli Metztli
Es un dios dual, como deidad masculina se llama teccistecatl, el del caracol grande y como deidad femenina se llama
metztli, luna. Sus símbolos más
importantes son el caracol que lleva en la cabeza y las fauces de la oscuridad
que la rodean; su vestimenta blanca alude al color de la luna.
Mazatl Tláloc
El regente de este día es el dios de la lluvia, era un dios benigno así
como maligno pues, por un lado enviaba las lluvias que propiciaban el
crecimiento de las plantas, pero, por otro podía atraer relámpagos tormentas y
granizos que destruían las cosechas
Tochtli Mayahuel
La patrona del día conejo es la diosa del maguey, mayahuel, de esta planta se hace una bebida embriagante el
pulque, por eso está asociada con el conejo que es el símbolo de los de la
embriaguez pues los cuatrocientos conejos Centzontotochtli
son los dioses de esta bebida.
Atl Xiuhtecuhtli
El patrón del día agua es el dios del fuego, se
trata de una deidad muy antigua por lo que también se le llama Huehueteotl, el dios viejo; era muy
venerado, en cada casa recibía ofrendas, por ejemplo, se echaba pulque al
fogón.
Itzcuintli Mictlantecuhtli
El patrón del día perro es el dios de la
muerte, como se mencionó anteriormente los perros ayudaban en su viaje al
inframundo a los espíritus humanos.
Ozomatli Xochipilli
El dios de este día es el dios de las flores,
deidad de la danza, de la música, de las artes y de los juegos.
Malinalli Patécatl
El día hierba se encuentra bajo la influencia
de Patécatl uno de los múltiples dioses del pulque. A él se atribuía haber
descubierto que al agregar ciertas raíces a la espumosa bebida esta se volvía
embriagante.
Acatl Tezcatlipoca
Tezcatlipoca era el gran mago, hechicero por
excelencia y dios del destino; él sabía todo sobre los humanos, leía sus
corazones, tenía poder para juzgarlos y perdonarlos. Él es quien daba y quitaba
riqueza, los humanos sabían que dependían de él, y por eso se llamaban a sí
mismos “sus hombres” o “sus esclavos”.
Ocelotl Tlazolteotl
Diosa de la basura, también se le llama Tlaelcuani, comedora de inmundicias, por
eso su boca esta manchada de negro, entre las inmundicias hay que contar los
pecados cometidos por el hombre; por eso los seres humanos se confesaban ante
ella, tenía el poder de perdonar los pecados. Como solo una vez en la vida
podían confesarse muchos esperaban hasta la vejez
Cuauhtli
Tezcatlipoca rojo
Las deidades relacionadas con el sol tienen el
cuerpo rojo y el pelo amarillo, por eso este dios es el regente del día águila
pues esta ave representa al sol mismo, aquí vemos al dios como xipe totec “nuestro señor desollado”
Cozcacuauhtli
Itzpapalotl
Es la diosa de las mujeres muerta en parto. Se
creía que estas mujeres quedaban deidificadas y acompañaban al sol; a veces
bajaban y aparecían en los cruces de caminos.
Ollin Xolotl
Está relacionado con el movimiento pues los
dioses se sacrificaron para crear al sol y ponerlo en movimiento.
Tecpatl Chalchiuhtotolin
Pavo de jade es el dios del día tecpatl,
es otro nahual de Tezcatlipoca.
Quiahuitl Tonatiuh
El dios del sol, podemos traducir Tonatiuh como: “el que va irradiando”
la palabra tona significa día o dar
calor y tiuh indica acción hacia
afuera.
Xochitl Xochiquetzal
Pluma de quetzal florida es el nombre de la diosa del día flor, esposa de
Xochipilli, esta diosa es la patrona de la belleza.
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